lunes, 2 de agosto de 2010

O R G U L L O .

¿Sabes qué te digo, gilipollas? ¡Que te den!
Estoy cansada de llorar por ti, de decirle a todo el mundo que te echo de menos. Pero, en el fondo, me alegro de haberlo echo, porque he demostrado que no me he rendido, porque para mí esto si era importante, no era un capricho infantil. Pero ahora la que se va para no volver JAMÁS soy yo, porque me he cansado de arrodillarme.
Porque jamás en mi vida me había humillado tanto por una persona que vale mucho menos que yo, QUE TE DEN tío, estoy harta de tus aires de superior.
Me voy a enamorar de otro, voy a vivir mi vida con otro y ya te tocará el día de llorar por mí, porque yo seré feliz y tu desperdiciaste tú tiempo jugando a ser un EGOÍSTA de mierda, ¿entiendes?
Espero que la vida te dé lo que deseas PERO AL REVÉS.

No hay comentarios:

Publicar un comentario